Además de las superficies de mármol, hay otros tipos de suelos que deben tratarse cada cierto tiempo. Nos referimos a los suelos de granito, a aquellos fabricados con materiales plásticos, como los pavimentos de vinilo, y a los de terrazo.
A continuación, vamos a hablar de cada uno de ellos y de la frecuencia con qué deben tratarse.
Suelos de mármol
El mármol es un material empleado para suelos, escaleras y otras superficies como encimeras por su elegancia y resistencia. Suelen ser pavimentos que pueden presentar diferentes colores. Pero con el uso y la aplicación de productos no adecuados para su limpieza, tienden a perder brillo y a desgastarse. Por eso, para devolverle el brillo hay que tratarlo cada cierto tiempo. ¿Con qué frecuencia? El tratamiento especializado dependerá de muchos factores, como el uso que se haga de ese espacio, si tiene o no picaduras, golpes, arañazos, manchas... o si ha perdido el brillo. Por tanto, no hay un tiempo concreto, sino que habrá que observar su estado para determinar si hace falta o no realizar algún tipo de trabajo sobre el suelo.
Suelos de granito
Como el anterior, el granito es un material pétreo muy resistente y duradero. También ofrece diferentes colores y tonalidades. Lo que destaca de los suelos de granito no es tanto su elegancia como su belleza, que aporta un carácter distinguido y sobrio a la estancia. El paso de personas y las agresiones a las que se enfrentan (golpes, manchas, limpieza con productos abrasivos) pueden deteriorar su superficie y hacer que pierda brillo. Por eso, cada cierto tiempo es recomendable contratar los servicios de profesionales para que traten el suelo de granito y hagan que brille como el primer día. Al igual que con el mármol, dependiendo del estado del suelo y del uso que se haga, así será la frecuencia con la que tendremos que abrillantarlo.
Suelos de terrazo
Muchas personas creen que estos suelos no son tan delicados a la hora de limpiarlos como los de granito o mármol, por lo que no usan productos respetuosos con su superficie. El resultado es que pierden el brillo y se muestran apagados. A ello se une el desgaste que el paso de personas genera en el propio suelo. De este modo, cuando notemos que el suelo de terrazo presenta manchas o que ya ha perdido su brillo, tendremos que llamar a una empresa para que lo abrillante. Solo así conseguirá que brille de nuevo.
Suelos de vinilo
La presencia de estos suelos es relativamente reciente, si la comparamos con el uso que el granito, el terrazo o el mármol tienen. A pesar de ello, muchas personas optan por este material plástico por su resistencia, facilidad de instalación y naturalidad. Suelen ser pavimentos con muchas propiedades (antiácaros, antimanchas, antihumedad, antiabrasión…), pero eso no evita que se desgasten y pierdan el brillo. Cuando ello ocurre, es necesario abrillantar de nuevo el suelo.
El abrillantado de suelo es un tratamiento especializado que solo puede realizar una empresa con una larga trayectoria profesional en este tipo de trabajos. Estos profesionales cuentan con maquinaria industrial que elimina las machas, los arañazos y demás abrasiones que presenta el suelo para devolverle su brillo original. Además, la mayoría de ellos emplean solo productos de calidad que abrillantan y que son antideslizantes para evitar caídas o resbalones. Por eso, a la hora de devolverle el brillo a nuestro suelo hemos de confiar en una empresa dedicada a este tipo de trabajos.