Según un estudio promovido por CCOO, UGT, Asociació Profesional de Empresas de Limpieza (ASPEL) y Asociaciones Federadas de Empresarios de Limpieza Nacionales (AFELIN) el 16,3% del colectivo de trabajadores del sector de limpieza padecen del sindrome del tunel carpiano o epicondilitis, ambas patologias asociadas a los movimientos repetitivos de las extremidades superiores.En el sector laboral de la limpieza los trastornos musculo-esqueléticos constituyen la principal causa de baja laboral. Es importante por lo tanto, prestar especial atención a los aspectos ergonómicos que tienen que ver con la prevención de tales lesiones en un trabajo caracterizado por el desarrollo de actividades muy manuales generados por la realización de tareas repetitivas y la adopción de posturas forzadas con aplicación de fuerza.En las tareas de limpieza los brazos y manos realizan constantemente movimientos repetidos, pudiéndose producir lesiones en tendones, nervios, antebrazo, manos y muñeca.La disponibilidad de medios y utiles de limpieza adecuados resulta fundamental en este sentido. La tarea de escurrir la bayeta con frecuencia resulta de elevada importancia y merece una especial atención.Por eso pasa a ser imprescindible un clasico como el cubo escurridor con rodillos o Roller Bucket.
Este cubo evita el retorcimiento manual de las bayetas y gamuzas reduciendo los índices de baja laboral por lesión de movimientos repetitivos. y por otro lado aumenta la vida útil de las bayetas y gamuzas de cualquier tipo ya sean de algodon microfibra o piel sintetica.
Su funcionamiento consiste en el prensado mediante rotación de los rodillos sobre la bayeta o gamuza haciendo que el agua se desplace de su interior. El resultado es una bayeta y gamuza seca en un 95% dejándola en el punto óptimo de secado de mobiliario, cristales o carrocerías de coches.
El cubo escurridor fue un hito en la historia del diseño industrial español, Manuel Jalón creo en 1956 el primer cubo de este tipo hecho de hierro y madera.